estaba tan alto, tan alto que tenía vértigo. ¿estaba en algún edificio? si lo era, era el más alto que alguna vez haya existido. desde arriba, a través del piso, podía verlo todo. veía la calle, veía los pisos debajo mío, veía la acera, veía la gente caminando, tan pequeña. y acá arriba estaba intentando ser asesinada. balas iban. me estaban disparando pero no moría, no me hacían daño, sólo tuve miedo del plomo que se deshacía en el aire. tratando de salvar mi vida, hice un trato con mi asesino, quien terminó por darme su arma cuando le prometí a cambio un beso.
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